Por: Tatiana González Banquet
Son las 6: 30 de la mañana del domingo 11 de febrero; a mi lado un pocillo de café, específicamente el mugs que conservo como detalle de amigo secreto. Bien guardado tenía Dairo Acevedo quien me lo regaló, que a mí me gusta la literatura; por eso me regaló el mugs personalizado del escritor antioqueño Fernando González Ochoa, quien por cariño digo que fue mi primo.
Mi nombre es Tatiana González Banquet, comunicadora social- periodista hija del Alma mater, la Universidad de Antioquia y soy Urabaense hija de Necoclí.
No escribo para quejarme, sugerir o reclamar, noooo… desbordantemente le escribo hoy a la entidad que me abrió las puertas como practicante de comunicaciones y que a la fecha me mantengo en ella. CORPOURABA es academia y sin duda disfruto cada evento que apoya y se vincula para decirle a la comunidad universitaria en voz de su directora “aquí estamos para apoyar a la academia y juntos poder aportar bajo el conocimiento y la investigación al mejoramiento y cuidado de nuestro ambiente, la preservación de la flora y la fauna, la conservación de los bosques y el cuidado de los 514 kilómetros de costa con la que fue premiada la jurisdicción de CORPOURABA”.
Le escribo hoy a CORPOURABA con el corazón abierto y un revolcón de emociones que me erizan al saber que hago parte de la Autoridad ambiental de la hermosa región de Urabá; que guarda la mejor de la esencia ambiental y del quehacer por parte de cada técnico, profesional universitario, funcionarios y directivos.
En mi estadía he aprendido que la jurisdicción de CORPOURABA, es decir sus 19 municipios; tiene condiciones especiales en materia ecosistémica y ubicación geográfica; que administrativamente se divide en cinco territoriales: Atrato, Caribe, Centro, Nutibara y Urrao.
Municipios hermosos y costeros, autóctonos y ricos culturalmente, hermosos paisajes y mágica naturaleza, diversidad climática, existencia de páramos… que hoy se aprovechan para hablar de turismo sostenible, de ecoturismo, de negocios verdes para el futuro y del apoyo financiero, técnico y humano que ofrece CORPOURABA en compañía de entidades hermanas que tienen un objetivo común; para posibilitar el mejoramiento de la calidad de vida de muchas familias campesinas y urbanas que trascienden al emprendimiento, ejecutando ideas ecológicas que permiten el desarrollo sostenible y que sin duda aportan a mitigar los problemas ambientales a los que se enfrenta nuestro mundo segundo a segundo.
CORPOURABA me ha posibilitado disfrutar del espíritu ambientalista que tiene el capital humano que hace parte de la entidad, es indescriptible el placer de compartir una taza de café con los compañeros que en su momento fueron o fuimos a campo y que nos encontramos con las huellas de un cacó, con la orquesta que forman los micos y monos en la cima de los árboles, con el avistamiento de hermosas guacamayas, con la sensación de sentir el friecito del bosque al adentrarse en el; conocer la experiencia de cada campesino que cultiva, siembra y conserva… y que con mirada de agradecimiento dice: “doy gracias a CORPOURABA por el acompañamiento y el apoyo económico que me brinda para aprovechar la tierra, para mejorar mi casa, para comprar el uniforme de los niños, para comprar mercado y poder seguir sembrando”.
Me lleno de emotividad saber que hago parte de una entidad que no solo autoriza y lleva procesos administrativos; sino que también está hecha de sensibilidad humana, de mejora continua, de aportar al mejoramiento de la calidad de la ciudadanía, de educar ambientalmente, generar una cultura ambiental, de vincularse con corporaciones y entes culturales buscando estrategias lúdicas para llevar de manera más amena y pintoresca mensaje ambientales.
Es gratificante estar y saber que la entidad con sus 4 programas, 10 subprogramas, 20 proyectos y 46 metas; busca fortalecerse ambientalmente teniendo la educación ambiental como transversal para todas las acciones; pues no podríamos ejecutar e implementar procesos desligados a la educación y al conocimiento de saber que toda acción debe ser aportante al cuidado del ambiente, al mejoramiento de los recursos hídricos, mejoramiento de la calidad de vida, a mantener la biodiversidad…
CORPOURABA trasciende los espacios y acompaña a las madres de familia, los pescadores, transportadores, estudiantes, pequeños productores, familias campesinas, a los proyectos comunitarios ambientales, al ciudadano común y; nunca se cansa de generar campañas y estrategias para aunar esfuerzos y trabajar por ser una región aportante a la mitigación de los problemas climáticos, contaminación y manejo de residuos sólidos, deforestación, tráfico ilegal de fauna y flora, cuidado del recurso hídrico; de los problemas ambientales que nos afectan y que sin duda aprovecho el espacio para recordar que el cuidado del ambiente es responsabilidad de todos.
Me quedaría esta y otra vida contando mis aprendizajes y experiencias que me ha permitido vivir la entidad que casi casi cumple 50 años en la región, sin embargo me quedo con la enseñanza y la oportunidad de seguir aprendiendo ambientalmente y de multiplicar por todos los medios la belleza de hacer parte de la entidad y de saber que CORPOURABA desde el páramo hasta el mar es un gran ecosistema.